Al transportar un paquete existen dos elementos que pesan: el artículo “per se” y la envoltura. En ocasiones los suplidores le colocan sólo el peso del artículo, pues por lo regular son ellos mismos los transportistas de la carga o bien tienen acuerdos con su transportista local (USA), que les cobra por el tipo de […]

Al transportar un paquete existen dos elementos que pesan: el artículo “per se” y la envoltura. En ocasiones los suplidores le colocan sólo el peso del artículo, pues por lo regular son ellos mismos los transportistas de la carga o bien tienen acuerdos con su transportista local (USA), que les cobra por el tipo de servicio o la distancia que recorren al realizar el transporte y no por el peso de la carga.

En el caso de los Couriers, los transportistas, tanto aéreos como terrestres, calculan el peso real del paquete lo que incluye el peso del artículo y su envoltura. Es por esto que en AEROPAQ contamos con balanzas electrónicas (pesos) debidamente calibradas, en las cuales se pesan, sin la intervención humana, cada paquete que procesamos en nuestro almacén de Miami, asignándoles dicho peso a la etiqueta impresa, de forma automática y no manual. Así le pagamos a quienes nos transportan los paquetes vía aérea o terrestre, y ese mismo peso es por el que paga nuestro cliente.

Además, nuestras Terminales cuentan con balanzas (pesos) disponibles para los clientes que desean confirmar el peso del paquete recibido para validar el valor facturado.